Reconstrucción artística del estado de “snowball” al que se debió de ver sometida la Tierra durante la glaciación Huroniana. Autor y (posible) copyright: Fahad Sulehria.
La glaciación Huroniana fue una hipotética glaciación ocurrida durante la era Paleoproterozoica, hace unos 2.400 – 2.100 Ma, durante los períodos Sidérico y Riásico. Según las interpretaciones de numerosos geólogos y glaciólogos, esta glaciación habría sido una de las más intensas de todo el registro geológico, llegando a tener unos efectos muy similares a los de la glaciación Sturtiense-Varangiense (que ocurrió a finales del eón Proterozoico y desarrolló un estado de Tierra «bola de nieve»).
Situación paleogeográfica:
A comienzos de la glaciación Huroniana (hace unos 2.400 Ma) existían varias masas continentales principales formadas a partir de la lenta fragmentación del gigantesco supercontinente Kenorland (iniciada hace unos 2.500 Ma y que finalizó hace unos 2.000 Ma). Estas masas de tierra eran:
- Ur, formado por los cratones de Kaapvaal, Zimbabwe (actualmente localizados en el sur de África), Masora y Antananarivo (este último formado hace unos 2.500 Ma, ambos localizados en la isla de Madagascar), por los cratones de Antongil (también en Madagascar), Dharwar Occidental, Dharwar Oriental, Singhbhum y el territorio de Bastar (en la India) y por los cratones de Pilbara y Yilgarn (en Australia Occidental);
- Ártica, formado por los escudos Canadiense y Siberiano, el cratón de Wyoming (en EEUU) y el cratón de Karelia (en Finlandia);
- Báltica, que estaba unido, o parcialmente unido, al cratón de Kola (en el noroeste de Rusia);
- Los restos de Kenorland, que incluían a la Antártida, parte de Australia Occidental, el Sur de China (cratón de Yangtze) y Atlántica (formada a su vez por los cratones de África Occidental, Congo y Nilo Occidental –actualmente localizados en África– y por los cratones de Amazonia, São Francisco y Rio de la Plata –situados en Sudamérica–), posiblemente unidos todavía a Ur.
Esquema que muestra a ‘grosso modo’ la disposición de los cratones más significativos que constituyeron el supercontinente Kenorland, indicándose en rojo la fragmentación que separó Ártica (parte inferior en el dibujo) del resto de Kenorland (unido a Ur). En verde se señala la posterior separación entre Kola (abajo) y Karelia (arriba) debida al nacimiento de un nuevo océano, que también provocará la separación de Báltica. NOTA: la masa continental referenciada como India es una parte de Ur. Autor: desconocido; modificado por Geofrik.
La apertura de nuevos océanos empujaba a todos estos continentes, provocando la colisión de unos cratones con otros y generando una intensa etapa orogenética. Así mismo, al fragmentarse Kenorland en varias masas continentales más pequeñas, la superficie continental invadida por el mar se incrementó, generándose multitud de mares someros y permitiendo un rápido desarrollo y expansión de las plataformas continentales, lo que a su vez favoreció el desarrollo de extensas comunidades de tapices microbianos (manifestados en el registro geológico por una gran abundancia de estromatolitos) productores de oxígeno.
Origen y final de la glaciación:
Aunque a día de hoy todavía no hay consenso sobre las causas que llevaron a la glaciación Huroniana, se cree que la causa principal de que se produjera esta glaciación fue la intensa desestabilización del clima provocada por el metabolismo de las primeras cianobacterias (que ya habían desencadenado, en el Sidérico, la Gran Oxidación), al romper el equilibrio existente entre los gases de efecto invernadero por adición de oxígeno y eliminación del CO2 durante la realización de la fotosíntesis oxigénica, y por la oxidación de metano a dióxido de carbono en contacto con el oxígeno atmosférico.
Del mismo modo que no se sabe con certeza qué provocó la glaciación Huroniana, se desconocen cuáles fueron las causas que llevaron al fin de esta glaciación, siendo muy probable que su fin se debiera al intenso vulcanismo que estaba teniendo lugar durante la fragmentación de Kenorland y a la desaparición de la gran parte de los organismos estromatolíticos provocada por la propia glaciación, lo que acabaría con la retirada masiva del CO2 de la atmósfera, y permitiría que tanto éste como el metano se volviesen a acumular en ella.
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Figuras:
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–Anónimo (2013). “Kenorland”. Ranker: http://www.ranker.com/pics/N1000235451/kenorland-natural-features-photo-u1
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–Fahad Sulehria (2007). “Terrestrial planet [Earth-sized]“. 5: an Extrasolar Planets: http://www.sunflowercosmos.org/gallery/new_gallery_images/5_terrestrial_planet_1.jpg
Referencias:
–Cavalier-Smith, T. (2006). «Cell evolution and Earth history: stasis and revolution». Philos Trans R Soc Lond B Biol Sci, 361(1470): 969-1006: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/16754610
–Colaboradores de Wikipedia (2013). «Huronian glaciation». Wikipedia, la enciclopedia libre: http://en.wikipedia.org/wiki/Huronian_glaciation
–Evans, D.A., Beukes, N.J. & Kirschvink, J.L. (1997). «Low-latitude glaciation in the Palaeoproterozoic era». Nature, 386(6622): 262-266: http://www.nature.com/nature/journal/v386/n6622/abs/386262a0.html
–Hyde, W. et al. (2000). «Neoproterozoic ‘snowball Earth’ simulations with a coupled climate/ice-sheet model». Nature, 405: 425-428.
–Kopp, R.E., Kirschvink, J.L., Hilburn, I.A. & Nash, C.Z. (2005). «The Paleoproterozoic snowball Earth: A climate disaster triggered by the evolution of oxygenic photosynthesis». Proc. Natl. Acad. Sci. U.S.A. 102(32): 11131–11136: http://www.pnas.org/content/102/32/11131.full.pdf+html
–Lane, N. (2010). «First breath: Earth’s billion-year struggle for oxygen». New Scientist (2746). A snowball period, c2.4–c2.0 Gya, triggered by the Great Oxygenation Event: http://www.newscientist.com/article/mg20527461.100-first-breath-earths-billionyear-struggle-for-oxygen.html
–Williams, G.E. & Schmidt, P.W. (1997). «Paleomagnetism of the Paleoproterozoic Gowganda and Lorrain formations, Ontario: low palaeolatitude for Huronian glaciation». EPSL, 153(3): 157-169: http://www.cosis.net/abstracts/EAE03/08262/EAE03-J-08262.pdf